domingo, 23 de febrero de 2014

DE TERTULIA CON: "DON ENRIQUE"



ENRIQUE ALONSO PÉREZ

       INTRODUCCIÓN.-

       ENRIQUE ALONSO PÉREZ (La Bañeza, 1936), maestro jubilado desde el año 2.000; viudo desde el 8 de agosto de 2.011, fecha en que falleció su inolvidable compañera  de vida PAQUINA, después de 50 años de matrimonio; es padre de 4 hijos y abuelo con 6 nietos, de los que se siente "abuelamente" enamorado. A punto de cumplir los 78 años, la viudedad le está resultando harto difícil de sobrellevar. ¡Ánimo, ENRIQUE, que los tuyos están (estamos) contigo!
       
       Dejo a un lado otros datos biográficos hasta que llegaste a Boñar un uno de septiembre de 1.963, cuando Paquina te iba a regalar el primer hijo varón (tu homónimo Enrique) y tú te preparabas para iniciar un largo periplo en la misión de maestro después de dos años de rodaje (en el barrio de la Inmaculada y Velilla de la Reina, respectivamente); en aquel momento, venías a suceder a Don Emilio Puente (mi admirado y querido maestro) en la escuela ubicada en la parte inferior derecha de la Casa Consistorial (hoy, oficina de Correos). Era como una premonición de tu futuro trivocacional  en tu segunda "patria" BOÑAR, donde ejerciste como maestro, concejal y bibliotecario.


Con tus alumnos en El Chivero (década de 1960)

       DE TERTULIA.-

       Además de otros temas que fueron surgiendo en la entrevista que mantuvimos en ese bar de la capital del Reino (Cuna del Parlamentarismo), deja que me retrotraiga a los albores del curso 1987-88, momento en que tú volviste para León (Navatejera, concretamente) y yo te brindaba mi "homenaje de papel" a través del DIARIO DE LEÓN, medio en el que hemos compartido otras experiencias más allá de la Enseñanza. De aquel artículo periodístico, voy a entresacarte algunos párrafos que te ayuden a sobrellevar mejor la viudedad.

       "... Entonces la Escuela lo era casi todo: formación intelectual, cívica, religiosa y deportiva. Aún recuerdo yo con nostalgia aquellas competiciones escolares en las instalaciones del Hispánico, con motivo de la fiesta de San Fernando. Mas ¿qué te voy a decir a ti que tú no sepas? Tus vacaciones de verano las ocupabas en el Campamento Nacional (primero, Provincial) "José Antonio", como administrador al servicio de la OJE...

       Tu segunda "dedicación" te llevó a ser concejal, por el tercio familiar, durante los años 1.966-73, bajo el mandato de D. Félix Población Población (+). Tiempos aquellos en que tu trabajo en lo que hoy llamaríamos "Comisión de Cultura" se vio empujado por el dinamismo incansable de D. Faustino Bernardo Buelga (+), secretario por muchos años de nuestro ayuntamiento...

       Tu tercera "empresa": encargado de la Biblioteca Pública Municipal desde el 1 de enero de 1.966 (aunque fuera inaugurada el 1 de abril de ese mismo año). En ese rincón del ala inferior izquierda del edificio municipal, fuiste conociendo y queriendo, cada día un poco más, esta riquísima zona del Alto-Porma (¿te recuerda algo el Centro de Iniciativas Turísticas?). Miles de horas en contacto con los libros, dentro de "tu" remozada biblioteca, que será sin duda un pequeño-gran sueño hecho realidad...

         Además, y por si esto no fuera suficiente, en los años setenta simultaneabas tus otras ocupaciones con la de Secretario del Colegio Libre Adoptado, con anterioridad a la implantación de la E.G.B. (que fue, progresivamente, sustituyendo al Bachiller Elemental). Aquí se inició nuestro contacto más directo en la tarea de la Enseñanza. Yo me estrenaba como profesor de Bachillerato, con mi licencia en Filosofía recién terminada en Roma, sustituyendo a otro buen amigo nuestro, Don Mario (+). Con nosotros iniciaba también su andadura, como conserje del colegio, Luis Manso, muchacho polifacético, que recalaría más tarde en la administración municipal...

      Y llegamos al curso académico 1.974-75. Tú, director del Colegio Nacional Mixto Comarcal de E.G.B., pasabas a ocupar las dependencias del C.L.A. (carretera de Sabero)... Terminado el Colegio de Valles en 1.978, tú estrenabas "casa" y yo volvía al punto de partida, en el curso 1.979-80, como director del Centro Municipal Homologado "Pablo Díez-Rosario Guerrero". De esta forma, se reanudaban los eslabones de la cadena educativa: E.G.B - B.U.P. -C.O.U., rota cinco cursos antes en nuestra villa...

        Para el final, he dejado otro vínculo común, otro "quehacer" compartido en la prensa legionense. También en esto has sido predecesor y estímulo..."




       Actualmente, ambos jubilados en el mundo de la Enseñanza, seguimos recordando nuestras colaboraciones con el Diario de León. Tú, por motivos personales, nos has dejado sin tus sustanciosos artículos de la sección RETABLO LEONÉS. Yo, de momento, sigo con mis crónicas deportivas de BOLO LEONÉS. Ambos, abuelos, felicísimos con nuestros nietos. ¿Qué más podemos pedir?
       
       Ah, sí, nos queda ese proyecto común con Manolo, el Cuco. No tenemos prisa.




Otros dos momentos de tu dilatada biografía boñarense.


5 comentarios:

José dijo...

Los que tuvimos el privilegio de ser alumnos de Don Enrique Alonso, te agradecemos este homenaje en tu pagina que yo visito con frecuencia, para recordar tiempos vividos en esa villa. Es una pena que no se recuerde mas las obras realizadas por D. Enrique a lo largo de tantos años. Yo tengo que decir que me marco para toda mi vida. La foto con todos sus alumnos me la mando él cuando después de 40 años volvimos a contactar personalmente y por correo electrónico. Gracias Pedro una vez mas. Me gusta tu pagina por que me trae el recuerdo de muchas personas que conocí y con los que compartí clases y juegos de mi niñez. Un saludo:
José (Ayerza) "Chema"

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Buenas tardes,"Chema" (Ayerza):
Ya veo que el magisterio de DON ENRIQUE te marcó profundamente. Ya sabes, "de bien nacidos..." No sabía que la foto te la había mandado él. Gracias, en todo caso... y un abrazo cariñoso.
Pedro.

Mº Luisa dijo...

efectivamente D. Enrique forma parte del patrimonio educativo y cultural del pueblo; para mi fue casi vecino tanto en el ayuntamiento como en las escuelas. Y el primer contacto que yo tuve con él o mejor dicho con Dª Paquina fue con 18 o 19 años terminando magisterio cuando me eligió para dar clase a sus hijos (tendría entonces Mari-Jose 3 o 4 añitos)¡Que nervios! una novata como yo enseñando "letras y números" a los hijos de todo un maestro. Y el contacto ya siguió siempre. Incluso por una casualidad me encontraba en León y pase a darle un abrazo cuando falleció su mujer.
Homenajes y reconocimientos asi cuando puedan verlos y disfrutarlos. Me sumo a ellos.
Un abrazo

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Buenos días, abuelita:
Estoy completamente de acuerdo contigo (como siempre): los homenajes resultan más humanos en vida. Abrazos, "besines" y... ¡feliz carnaval!

Anónimo dijo...

Gran hombre D.Enrique: excelente persona y excelente maestro.