viernes, 5 de febrero de 2016

MIS MEMORIAS DEL "NEGRILLÓN" (2)



Mural sobre la pared del Edificio MANUEL DÍEZ ROLLÁN (año 1987)

       En esta segunda parte de las MEMORIAS, quiero traer a colación a una persona muy querida entre los boñareses: DON CARLOS SANTOS VEGA. El fue nuestro párroco durante diecisiete años (1980-1997) y, desde entonces, podemos considerarle "hijo adoptivo de Boñar". En el intercambio de documentación que mantuve, hace un tiempo, con Don Enrique Alonso, encontré un artículo de revista firmado por DON CARLOS con el título: EL NEGRILLÓN DE BOÑAR. Contando anticipadamente con su aquiescencia, voy a seleccionar algunos párrafos de dicho artículo, que nos puede hacer reverdecer el cariño con que Don Carlos trata el tema de actualidad. Gracias anticipadas y... un caluroso abrazo de parte de todos los paisanos de Boñar.



DON CARLOS con el grupo de La Pastorada de Boñar (1980)


       "Al llegar a Boñar, es obligada la visita al varias veces centenario NEGRILLÓN... Todos, sin excepción, después de dar el abrazo ritual al arbolón, calculando los brazos necesarios para cerrar el anillo a su alrededor, se preguntan: ¿Cuántos años tendrá?

       En una ocasión, la interpelación fue dirigida directamente a un anciano lugareño que, con socarronería, contestó: -Cuando yo lo conocí, no servía para una "hijada"... Nuestro NEGRILLÓN contempló benévolo los primeros pasos y las infantiles travesuras de los más ancianos.

       Movidos por la curiosidad, hemos preguntado a la amable abuela del pueblo, la Sra. Genoveva de Lera que, para los cien años bien cumplidos, sólo necesita ocho meses y que conserva (conservaba -añado yo-, pues murió con más de 100 años) una envidiable lucidez en los recuerdos de su lejana infancia y, por lo tanto, su testimonio es de gran valor para el asunto que nos ocupa; sin titubeos nos contestó:

       -¡Ay, hijos! Yo siempre lo conocí así.

       Con gran avidez, esperando encontrar su fe de nacimiento, leí la nota que, en el Libro de Fábrica de la Parroquia, hizo poner en el año 1.574 Juan Gutiérrez de Villanueva, Visitador de este Obispado por el Ilustrísimo y Reverendísimo D. Juan de San Millán, Obispo de León, siendo párroco de Boñar D. Suero Alfonso: "Item mandó el Señor Visitador al Rector y Mayordomo que hagan cerrar la olmeda de esta Iglesia de pared o vargaños en derredor para que los olmos crezcan y los virgultos pululen y para la costa de esto se corte y se venda el olmo grande."

       ...¿Será el NEGRILLÓN de la plaza el olmo grande...? Si es válido el supuesto, hemos de calcularle unos 700 años, puesto que, en el año de 1574, su envergadura prometía los maravedises suficientes para cercar la olmeda, y sabemos que el negrillo es de lento crecimiento.

       Si los feligreses, obedientes, cortaron el olmo grande y cultivaron los "virgultos", hemos de pensar que, al contrario de lo que sucede en nuestra especie racional y civilizada, que a la sombra y cobijo del hermano mayor medran los más pequeños, nuestro NEGRILLÓN, por selección natural debido a su precoz desarrollo, dejó raquíticos a sus hermanos "virgultos". En este caso, su edad no bajará de los cuatrocientos quince años.

       Aunque no podamos precisar su nacimiento, merece nuestro respeto, admiración y cuidado. De esto último ya han tomado conciencia las autoridades locales que, recogiendo el sentir del vecindario, en el año de 1.986 le han propiciado el tratamiento oportuno para salvarle de la epidemia...

       Por derecho propio, ocupa un cuartel destacado en la heráldica de la Villa, juntamente con la torre y la fuente de la plaza... Sin duda alguna, él vio poner la primera piedra de la torre y, con toda certeza, llegar el agua a la fuente, según nos relata D. Ildefonso Valcuende, párroco de Boñar, en una curiosa nota que insertó en el folio 107 del libro 8º de Bautismos: "El doce de julio de 1.898 se pinó la columna de la fuente de la plaza y el agua llegó a la plaza el día 27 de junio. Los pilares y columna salieron de la cantera de un tiro o barreno y se trajeron a la plaza en tres piezas y los pilones por cavar o macizar".

       También, estremecido, ha visto algunas calamidades y ha compartido el miedo con el vecindario, como nos atestigua el mismo D. Ildefonso en una nota escrita al margen del folio 118 del mismo libro, que dice: "Los días 9 y 10 de junio del año 1.899 hubo en esta Villa dos inundaciones del Arroyo del Arvejal como no se habían visto ni oído. Nadaban los carros en la plaza. El segundo día fue mucho mayor".

       Por todo lo dicho, merece nuestros respetos, y pienso que no le parecerá mal la sugerencia que hago a quien corresponda: que, como todas las cosas humanas son caducas y perecederas, se podía ir pensando en plantar en un lugar adecuado algún "virgulto" que sustituya al Abuelón, por si algún día se cansara de vivir (cosa que Dios no quiera). De esta forma, Boñar seguiría siendo la VILLA DEL NEGRILLÓN".
        
       NOTA.- Querido DON CARLOS: Estamos en ello. Después de un período de recogida de ideas por parte del Excmo. Ayuntamiento de Boñar, queda pendiente la solución al "desmoronamiento del Abuelón".





Primavera del 2011 (izqda) e invierno del 2010 (dcha.)













       En mi entrada LA PODA DEL NEGRILLÓN (30-01-2012), publiqué un romance heroico dedicado al protagonista de nuestra historia local. Hoy lo completo con la partitura musical para todos vosotros, sufridos y leales seguidores del blog LA ESCUELA DEL NEGRILLÓN. Saludos cariñosos.





Foto histórica con los militares de la Escuela de Aviación de La Virgen del Camino





2 comentarios:

M. Luisa Alonso dijo...

Gracias Pedro. Sabes que se menciona a mi abuela, si no fuera porque tengo la publicación completa, te la pediría. Es de agosto de 1989 (ella murió justo 3 años después).
Casualidad, también en las noticias incluye la "reciente" cura de inyección del Negrilon. Ahora y con tu permiso, también recopilo tus musicas y letras. Mas abrazos

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Hola, "abuelona": Faltaría más! Tienes mi consentimiento total para recopilar mis músicas y letras en tu "prodigiosa memoria histórica". Que la normalidad nos siga acompañando en el año recién estrenado. Abrazos y abracines. Pedro.