martes, 4 de abril de 2017

PRÓLOGO "INÉDITO" PARA UN LIBRO FOTOGRÁFICO SOBRE BOÑAR (1)


DON ENRIQUE (febrero de 2014)


Carteles para la "fallida" realización del libro: "BOÑAR: HISTORIA FOTOGRÁFICA".

       En el primer aniversario de su muerte (05-04-2016), quiero rendir mi homenaje sentido y sincero a DON ENRIQUE, toda una institución en Boñar y su comarca. La última vez que nos reunimos en un bar de la capital, para preparar la segunda entrada en mi blog (DE TERTULIA CON DON ENRIQUE), charlamos también sobre un proyecto bibliográfico con fotografías sobre Boñar, su pueblo de adopción. Él, con su amabilidad característica, se comprometió a escribir un PRÓLOGO y me hizo llegar una serie de fotos. Aunque el libro no llegó a publicarse (por excesivos intereses y pretensiones de la editorial leonesa), nos queda el boceto de ÍNDICE y el PRÓLOGO que él me envió por Internet.

       Tres años largos después, las redes sociales han venido a espolear nuestro proyecto compartido (D. Enrique, Manolo el Cuco y yo), y el Grupo Público de Facebook ("TÚ NO ERES DE BOÑAR SI NO...") viene publicando y compartiendo últimamente un montón de fotos y comentarios que podrían servir perfectamente para confeccionar el comentado libro: "BOÑAR: HISTORIA FOTOGRÁFICA".

       Contando con el permiso tácito de sus hijos, me dispongo a publicar este PRÓLOGO INÉDITO. Sé que DON ENRIQUE y PAQUINA nos estarán animando desde arriba, convencidos de que todo es posible con la unión de los boñareses, incluidos sus cuatro hijos (Mª Esther, Enrique, Mako y Bruno). Gracias anticipadas por vuestro consentimiento y colaboración.



ÍNDICE del libro (arriba), y dos fotos históricas en la biografía de DON ENRIQUE (D e I).

SOBRE LA HISTORIA DE LA MONTAÑA DE BOÑAR

PRÓLOGO

       "Quiero comenzar el prólogo de este libro (que se escribe con todo el cariño por dos ilustres boñareses, y el que suscribe -no tan ilustre, pero sí enraizado en la comarca de Boñar, y "enganchado" de por vida a su Historia, a su devenir y al futuro que podamos proporcionarle-.

       Por eso, este prólogo comienza dando unos toques históricos de un Boñar que se remonta a ciertos vestigios romanos, de gran solidez, por conservarse una lápida votiva escrita en latín, que dice textualmente: "FONTI SAGINIFIGENO B.R.A. C.C.C. LV. HAS. AQUILEGUS. V.S.L.M."

      La controvertida inscripción latina, que se encuentra labrada en la peña inmediatamente superior del manantial, ha sido sin duda la que embrolló el sentido primitivo del uso de la fuente y su posterior vinculación a un balneario que nunca existió. Ocho traducciones diferentes -desde que, en 1572, apareciese la de Ambrosio de Morales- y ocho interpretaciones subjetivas que han desvirtuado el mensaje inicial, son más que suficientes para despistar a cuantos quieren tratar el tema desde una superficialidad siempre reñida con estudios serios y sistemáticos.

      Hoy está contundentemente aclarado -en contra de todas las versiones surrealistas que circularon acerca de los sestercios que costó "encañar" la fuente o la fecha en que se hizo- que el bueno de Alejo, el fontanero que estampó su nombre en la inscripción, no hizo otra cosa que dejar constancia, al uso de Roma, de su respeto y veneración al genio de la fuente, tal y como se repite en cuantas inscripciones votivas hay en nuestra geografía fontanera.

      LA FUENTE DE LA SALUD.-

      Otra preocupación nos invade a quienes llevamos ya más de cincuenta años estudiando y divulgando la peripecia de la villa de Boñar. Oímos, y hasta leemos a menudo, que hay quien confunde la Fuente de La Calda con la ferruginosa que conocemos como "Fuente de La Salud". Es un grave error que se está haciendo crónico, porque la gente hace más caso a la letra impresa que a sus propias observaciones cotidianas. En Boñar, todos sabemos que el agua de La Calda -la que tuvimos durante veinte años en los grifos de casa- es la que tiene al lado la repetida inscripción latina,y que nuestros abuelos más remotos la conocían por "El Hervidero", por aquello de que las burbujas de nitrógeno que despide en cantidad recuerdan el fenómeno de la ebullición. Después, a unos sesenta metros, se encuentra otro manantial con menos aforo -14 litros por segundo-, que las gentes de Boñar recogen en sus garrafas para beber con la intención de que cure su garganta.

      Pero la de LA SALUD nada tiene que ver con las anteriores, pues, así como aquéllas no contienen hierro, ésta lo arrastra disuelto en gran proporción, hasta el punto que está recomendada para  todo tipo de anemias. Una especie de monolito se alza para señalizarla, y en su base fluye el agua encañada dejando a su paso un rastro ferruginoso que delata su contenido. Una leyenda en latín, grabada gracias a un entusiasta farmacéutico del siglo XIX, reza así: "Clorosim sanat et jecur blanda diuresi / Aperit obstructum Martem praebendo solutum", que -según prestigiosos latinistas- quiere decir: "Sana la clorosis y con suave diuresis abre el hígado obstruido, dando resuelta la guerra".

      El paso de los Romanos no dejó ningún asentamiento estable que pudiese dar pistas a historiador alguno sobre los movimientos poblacionales.

      El pretendido Puente Romano, o PUENTE VIEJO, es de un puro estilo renacentista que no da lugar a ninguna duda. En cuanto a su origen se refiere, cualquier aficionado con inquietudes artísticas está capacitado para disipar posibles errores. 

      BOÑAR EN LA EDAD MODERNA.-

      Y así, damos un salto hasta el año 1764, en que la "Historia Universal", en su "ACADEMIA SEXTA" -específicamente dedicada al estudio de las aguas minerales-, cuando llega a describir la villa de Boñar, lo hace de la manera siguiente: "En el Reyno de León, en lo áspero de sus montañas, seis leguas distante de la capital, y cuatro del Principado de Asturias, está la Villa de Boñal, o Boñar. Población como de 80 vecinos en una sola calle. Es Señorío de los Excmos. Señores Condes de Lemos. El sitio y su Jurisdicción son amenos, aunque el término corto, porque las altas, y escabrosas montañas no permiten más: sí solo hacia el Mediodía es más estendido, y por la misma parte soplan los ayres con más libertad. El Valle, se dilata por tres leguas, es fértil de todas semillas, aunque lo más de él se emplea en prados para hierva, cercados de lino, y Huertas para hortalizas. Es la temperie de esta villa bastante sana, y así la gente se cría robusta y llega a una edad avanzada, aunque no goza de las mayores comodidades, pues de sesenta casas que tendrá la Villa, solas las diez y seis están cubiertas de texa, y las restantes de paja, y los vecinos se ven precisados a calzar zapatos de madera que llaman madriñas, por el sumo frío, y nieves; pues los más años empieza la primavera por fines de junio, y a principios de agosto ya vuelve otra vez refrescando".


OTRAS "FOTOS CON SOLERA"





En EL CHIVERO (década de  1960?)



En el Museo de la Fauna Salvaje (Valdehuesa)



6 comentarios:

Luis Alberto dijo...

Me adhiero al homenaje del omnipresente Don ENRIQUE, y me uno al deseo de que el proyecto de este libro sea algún día una realidad como historia viva de Boñar. Por de pronto, el prólogo brillante y para guardar. Un abrazo Pedro.

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Gracias, Luis Alberto, por tu adhesión. En cuanto al proyecto del LIBRO, hacen falta colaboradores para el desarrollo de los diferentes capítulos. ¿Te apuntas? Recibe otro abrazo.

ADAMOR dijo...

Grasiasssss ... Pedro
Me ha encantado recordar rostros de personas y hechos , muy bonito !!!👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Gracias, ADAMOR, el encantamiento es recíproco. Saludos cordiales.

Luis Alberto dijo...

Por supuesto que me apunto. Espero instrucciones. Un abrazo.

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Tomo nota. Seguiremos en contacto. Un abrazo.