jueves, 28 de marzo de 2013

DESDE LA COLUMNA AJENA (11): "NI LA RASPA"


 
Palacio de "Botines", con GAUDÍ como espectador de lujo
 
       Últimamente, el proceso de fusión de las Cajas de Ahorro se ha convertido en una especie de ceremonia de la confusión. Si a ello añadimos el papel jugado por los políticos (diputados, concejales y representantes sindicales), ya tenemos una radiografía completa de la enfermedad que aqueja a nuestra antigua CAJA DE AHORROS Y MONTE DE PIEDAD DE LEÓN. Pero dejemos la palabra a Álvaro que, desde su columna LA LIEBRE, nos dice lo siguiente:
 
 
NI LA RASPA
 
       Se nos vino encima el Carnaval con las máscaras puestas, con tanta impertinencia que alguno anda a tientas a ver si encuentra la goma por detrás de las orejas para que no lo retraten sin disfraz. Nos pilló con la Caja abierta, en ese estilo compadre que se dispensaba en Botines cuando venían los amigos empresarios con falta de liquidez y escasos de avales sólidos al despacho del presidente, que de tanta costumbre llegaron a convertirse en la misma persona para dejarse de rodeos: ¡qué bobadas, si ese último toque como uno mismo no se lo da nadie! Una rutina adobada con los pasamanos por la espalda que los políticos, colocados por intereses en el consejo, utilizaban para hacer carrera: miembros honorables que por una tarde tonta, si cuadraban bien dos reuniones seguidas y una asamblea, facturaban en dietas más de 1000 euros para regar la cena con los ahorros confiados de los paisanos leoneses.
 
      La juerga de todos estos años descubre ahora un agujero de 228 millones de euros al que se asoma el Estado para nacionalizar la Caja y acabar con cualquier pequeño reducto de poder financiero de León, después de 112 años de penar por los montes de piedad. Una decisión contra la que todavía boquean los responsables de la entidad con el eufemismo de que el riesgo se debe "a la exposición al mercado inmobiliario", como si la culpa fuera de los trabajadores que suscribieron una hipoteca, no de los que se aventuraron en Inmocajas, Agelcos y negocios en el aire, ni de todos los que aprovecharon su paso por la moqueta para dispensar dádivas y finiquitarse prejubilaciones millonarias. Esa arquitectura financiera de la cual saldrá de nuevo el presidente, Evaristo del Canto, a lomos de una chopper como Dennis Hopper, pulcro con la indemnización en la andorga, como cuando le despidieron en la anterior ocasión para después ir a repescarle con la chequera en la mano para que salvara la Caja, que ahí está: a la espera de cerrar 20 oficinas en la provincia y rescindir 1504 empleos.
 
 
 
Palacio de los Guzmanes, sede de la Diputación de León
 
 
      Hasta el miércoles, que coincide con la convocatoria del consejo de la Caja, todavía hay tiempo para disfrutar de las Carnestolendas del Carnaval y entregarse al desenfreno de la vida detrás de la máscara. Luego, todo será polvo y cenizas durante una Cuaresma larga que sobrepasará los 40 días de vagar por el desierto, entre espejismos y tentaciones. No va a quedar ni la raspa del toro.
 
 
Vista de la "Pulchra Leonina". Fotos de ISIDORO CUESTA.
 
 
 
 
 
 
 


 

No hay comentarios: