lunes, 1 de diciembre de 2014

CORREN MALOS TIEMPOS PARA... "LA FILOSOFÍA"



       El pasado 20 de noviembre se conmemoró el DÍA MUNDIAL DE LA FILOSOFÍA y, el día 25 de noviembre, los "filósofos" celebramos la fiesta de nuestra patrona: SANTA CATALINA DE ALEJANDRÍA.



       Sin embargo y a pesar de las cuatro leyes en los últimos 25 años (LOGSE, en 1990; LOCE, en 2002; LOE, en 2006; y LOMCE, en 2013), los diferentes gobiernos han denostado a la FILOSOFÍA en cada reforma educativa. Si a ello sumamos las escasas o nulas salidas que esta titulación ofrece en el mercado laboral, podemos entender por qué los jóvenes no se sienten atraídos por los estudios que contribuyen al desarrollo del pensamiento crítico en los campus universitarios. 

       Los datos estadísticos del curso 2013-14 en la Universidad española son harto elocuentes. Del millón y medio de alumnos, únicamente 7.483 (el 0,5%) se matricularon en Filosofía. Por contra, el 50% estudia alguna carrera relacionada con las Ciencias Sociales y Jurídicas; el 20,7% escoge Ingenierías o Arquitectura; un 16,5% opta por Ciencias de la Salud, y un 10% se inclina por las Artes y las Humanidades. De este 10% (unos 143.000 alumnos), sólo un 5% se decanta por el área filosófica.

       "Algo ocurre en la sociedad cuando la mitad de estudiantes pertenece a Ciencias Sociales y sólo el 10% a Humanidades... No es un problema superficial, sino muy serio" (FERNANDO BRONCANO, catedrático de Lógica y Filosofía de la Ciencia de la Universidad Carlos III de Madrid).

       Basta contrastar la opinión de ANGEL GABILONDO (ex-ministro de Educación) y la de ANTONIO CAMPILLO (presidente de la Conferencia Española de Decanatos de Filosofía) con la del actual ministro de Educación (JOSÉ-IGNACIO WERT) para comprender la dimensión trascendental del problema. Según Gabilondo, "tenemos una idea de utilidad demasiado tecnocrática... Para quienes consideran que el conocimiento ha de ser inmediatamente aplicable y únicamente es interesante como medio o instrumento, semejante pensar les resulta infecundo... No hay que vincular el conocimiento a la idea de mercado y es conveniente responder a las necesidades sociales, porque no siempre lo demandado es lo más necesario socialmente". Para el señor Campillo, "en la tradición del pensamiento occidental, durante siglos se valoró al hombre culto, que era aquel que sabía de Literatura, de Ciencia, de Filosofía... Ahora, las élites políticas no necesitan ser cultas para tener poder. Se ha producido un divorcio entre el poder y la cultura y eso ha dado lugar a una situación crítica y muy peligrosa".  El señor Wert, en cambio, ha reducido la enseñanza de la Filosofía en Secundaria casi a la nada, como una de las tres materias obligatorias existentes.


       
       Para completar este sombrío panorama de la FILOSOFÍA, recojo unos párrafos de PEDRO G. CUARTANGO (Suplemento G/U/ CAMPUS de EL MUNDO, 19-11-14) en los que aboga por la necesidad de la FILOSOFÍA. "La lectura de los trabajos de los grandes filósofos me alejan de una sociedad en la que casi todo, desde la economía a la cultura, se reduce a espectáculo, a mera representación... La filosofía es como una especie de vínculo que une el pasado con el presente y que transmite unas voces que me parecen absolutamente vivas y necesarias para entender lo que nos está sucediendo... Puede que la filosofía no sea productiva ni útil, pero a mí me resulta necesaria para sobrevivir.
       ...Al igual que sucede con la religión, la filosofía nos da la perspectiva de nuestra insignificancia y de las vanidades a las que consagramos muchos de nuestros esfuerzos... Pensar sobre las grandes preguntas y disfrutar de la cultura... por lo menos nos ofrece un cierto consuelo en una existencia sin sentido en la que, como dice el proverbio evangélico, ceniza somos y a la tierra volveremos..."



        
              

2 comentarios:

Luis Alberto dijo...

Qué tiempos, no tan lejanos, donde nos formaban de verdad, y se nos enseñaba a vivir con respeto, humildad y generosidad, y aprendíamos con un espíritu creativo todas las ideas y todos los valores que constituyen la grandeza de una cultura. Mirando hacia atrás sin ira, uno piensa y se pregunta: ¿pero adónde hemos llegado, en qué nos hemos convertido...?. Mi admirado Pedro, profesor y amigo, maldigo una y mil veces la penuria de nuestros hijos y de tantos jóvenes valores, apéndices de cables, tablets, whassaps..., y me recreo, ¡¡porque me da la gana!! en la leche en polvo del colegio, y en las magistrales clases docentes de D. Eligio y D. Marcos, pura filosofía de la vida, y no la extravagancia de los métodos de hoy.

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Buenos días de nuevo, LUIS ALBERTO:
Rectificando o completando el dicho popular, "CUALQUIER TIEMPO PASADO FUE... MÁS FORMATIVO! Celebro que coincidamos en lo que deben ser los objetivos de la EDUCACIÓN (que tiene que ser una "cuestión de Estado", y no un instrumento político). Próximos a las FIESTAS NAVIDEÑAS, te deseo toda clase de bienes en compañía de la familia. Otro abrazo, paisano.
Pedro.