Plaza del Espolón y Puerta Castillo o Arco de la Cárcel (León)
En marzo del año pasado y coincidiendo con la entrevista que le hice a ÁNGEL LORENZANA "EL SASTRE", éste me hizo llegar un libro del que -según él- hay muy pocos ejemplares, tanto en bibliotecas o librerías como en manos de particulares. Se trata de una obra titulada LA PROVINCIA DE LEÓN, escrita por D. José Mourille López, Capitán de Infantería, en el año 1928.
Prologado por D. Mariano D. Berrueta, con fecha 16 de Mayo de 1928, y con las preceptivas licencias del Presidente de la Diputación, D. José María Vicente, y del Alcalde del Ayuntamiento, D. Francisco Roa de la Vega, además de CUATRO PALABRAS MÍAS (del autor), hace un estudio con todo lujo de detalles (geográficos, históricos, humanos e incluso publicitarios) acerca de nuestra extensa provincia leonesa. En definitiva, se trata de un recorrido por los distintos Partidos Judiciales, Ayuntamientos (con sus pueblos y núcleos de población), así como otros datos de interés a principios del siglo XX: "monumentos, bellezas naturales y riqueza agrícola e industrial..." -tal como reconoce el Sr. presidente de la Diputación, D. José María Vicente, en la introducción-. O como dice D. Mariano D. Berrueta, "... éntrate por estas páginas y encontrarás un ambiente sano de amor a esta tierra de León, y un confortador cuadro de cuantas riquezas atesora esta Provincia..."
Su autor,que fue Delegado Gubernativo y Secretario del Comité Provincial de Unión Patriótica, así como concejal del Ayuntamiento de León, demuestra ser una persona muy documentada en los albores del siglo pasado.
ALGUNAS PÁGINAS ESCOGIDAS
2 comentarios:
Genial como siempre. Excelente labor de investigación. Todo vale para seguir conservando el "apego" a la tierra. Y como anécdota: ahora sé porque mi abuela cuando habia mucha gente en casa decía "esto parece la fonda La Valeria". Efectivamente existió por lo menos en la publicidad.
Besotes colega-abuelo
Buenas noches, abuelita:
Está claro que sintonizamos perfectamente en lo del "APEGO" a la tierruca. ¡Y cuántas cosas nos quedan por conocer todavía!
Besotes y besines.
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