martes, 3 de julio de 2012

LOS PUEBLOS DEL AYUNTAMIENTO (9): "OVILLE"














Entrada al pueblo (I) y vista panorámica desde la plazoleta de la Iglesia de SAN ADRIANO (D).





      BREVE RESEÑA HISTÓRICA.-

      (OVILE, que significa majada de ovejas).
      Según los vestigios que afloran en su terreno, fueron los Romanos quienes explotaron minas de hierro en este pueblecito.
      No encontramos el nombre de este pueblo hasta el Becerro de Presentaciones de la catedral de León de 1468, que menciona su parroquia como perteneciente al Arciprestazgo de Rueda.
      Oville pertenecía al antiguo concejo de Boñar.
      Dista de la capitalidad del municipio 6,5 kilómetros.
      Su iglesia parroquial data del siglo XVII y está dedicada a Santiago apóstol, en honor del cual se celebran fiestas patronales el día 25 de Julio.
      Aquí existe la "Cota de Oville", y de su suelo se extrae sílice destinado a la industria vidriera.






















      En la tarde del último día de junio, con un descenso considerable de las temperaturas, giré visita una vez más a OVILLE, cuyo desvío de 3,5 kilómetros arranca en Remellán (al lado de la Venta del mismo nombre).























      Aunque ya hacía algún tiempo que no me dejaba ver por este pueblecito solidario y acogedor, debo reconocer que en él tengo un montón de recuerdos. Los más remotos me remiten a la infancia, cuando Horacio (el hijo de Isidro) me llevaba con él en el carro a repartir los pellejos de vino y, para poder subir la empinada cuesta de la calle Central hasta la cantina de Jeromo, tenía que enganchar un segundo macho. Sin embargo, los recuerdos más vivos y recientes se remontan a la década de los años 80, coincidiendo con la estancia de Don Carlos en Boñar y con mi actividad docente en el Centro Municipal "P. Díez-R. Guerrero".


      RECONSTRUCCIÓN DE LA ANTIGUA IGLESIA PARROQUIAL.-




      








       En el año 1982, los esforzados parroquianos de Oville hicieron la guerra por su cuenta y pusieron en pie este templo, prácticamente derruido y cerrado al culto desde 1937. Esta iglesia, dedicada a San Adrián, data de 1767 (según reza en el frontal del pórtico) y consta de una nave rectangular y un ábside, en planta de cruz latina, de corte románico. La bóveda en piedra de toba, y las paredes encaladas (raspadas después para que luciera la piedra). En el brazo derecho del crucero, se encuentra la sacristía, reducida y sólida. En el izquierdo, había una capilla lateral (quizá privada), que hubo que bloquear con un muro debido al lamentable estado de su techumbre. En el lateral derecho, se halla un pórtico cubierto con columnas, remozado con bovedillas y viguetas. En el flanco izquierdo, al norte, está el cementerio del pueblo, según la costumbre tradicional cristiana.

      No obstante, el mérito mayor hay que buscarlo en la reconstrucción de la espadaña, totalmente derribada; pero eso no arredró a estos montañeses avezados en el tratamiento de la piedra. En cuanto a las campanas, una fue donada por la Confederación Hidrográfica del Duero, y la otra fue trasplantada de la ermita de Santiago, iglesia del centro del pueblo en la que todavía hoy se siguen celebrando los actos de culto. La veleta, así como las puertas de entrada, fueron cedidas gentilmente por "Construcciones Guardo" de Boñar y, al igual que la campana, procedían de los pueblos anegados por el Embalse del Porma. La teja, en gran cantidad, fue donada por "Boñar Residencial", procedente de la casa del Catalán.



Ermita de SANTIAGO APÓSTOL, actual iglesia parroquial

      La reinauguración de la primitiva iglesia parroquial se celebró por todo lo alto el día 25 de julio de 1982, fiesta del patrono Santiago, con misa cantada por el Coro de Boñar, así como con asistencia del Grupo de Bailes El Negrillón, que amenizó la romería y la degustación de la abundante chanfaina. Personalmente, también colaboré con el teclado YAMAHA (acompañado por Gelo en la guitarra eléctrica) a la hora del baile. De esta forma, a partir de entonces, los ovillenses pasaron a tener dos fiestas patronales: Santiago (25 de julio) y San Adriano (8 de septiembre). De todo ello, quedó constancia en las páginas del Diario de León (25-07-1982).






      Como de bien nacidos es ser agradecidos, en el año 1997 volvimos a compartir buenos recuerdos con motivo de la despedida de Don Carlos Santos Vega.
      Al volver a hacer un recorrido por el pueblo, quiero saludar a los amigos y ex alumnos que sigo teniendo en OVILLE (Lucas, Gelo, Marisa -la hija de Elviro-, Morán, Guadalupe, Begoña...). Además, evoco también la memoria de Pin (fallecido en desgraciado accidente en la mina de sílice cuando yo era juez de paz en Boñar), Gervasio,  Camilo, Coque -entre otros-. Descansen en paz.


ALBUM (UN RECORRIDO POR LA CALLE CENTRAL)






























La CASA DEL PUEBLO (antigua Escuela restaurada)







UNA VISITA AL BARRIO DE "ABAJO"



Reguero de Oville




Mina de sílice al fondo


Molino de LA GORGORITA


Panorámica de Oville desde la torre de la Iglesia de San Adriano




Grupo LA BRAÑA


























4 comentarios:

manuel dijo...

Hola Pedro: te mereces la medalla al mérito turístico por tus reportajes de los pueblos del municipio. Son magnificos y para el que quiera conocer la zono de obligada visita. Sigue dándonos noticia de estos pueblos, a veces, desconocidos hasta por los de la "capi". Hasta pronto

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Manolo:
Seguimos en sintonía. Espero poder completar el recorrido por esos "nuestros pueblos del municipio". Ciertamente, se nos están quedando despoblados. Gracias por el aliento que me transmites. Un saludo cordial y hasta pronto.
Pedro.

Anónimo dijo...

Hola Pedro: soy Begoña. Quiero agradecerte el maravilloso reportaje que has hecho del pueblo que me ha visto nacer y en el que tengo mis raíces.

Describes muy bien su historia, los acontecimientos pasados y en las fotos que has hecho apenas hace tres meses se refleja claramente el presente de Oville.

Me ha emocionado profundamente el recuerdo que tienes hacia Pin, mi padre, fallecido hace casi 29 años.Muchas gracias.

Enhorabuena Pedro por el fantástico reportaje que has descrito de Oville y demás pueblos del municipio. Un abrazo muy fuerte.

Pedro Caballero Rodríguez dijo...

Hola, Begoña:
Lo primero, gracias por los elogios que me dedicas.
Lo segundo: cuando los recuerdos son agradables, dejan un poso especial en nuestra memoria. Y eso es lo que me ha dejado Oville, tu pueblo de nacencia y tus raíces.
Te deseo de corazón todo lo mejor. Otro abrazo fuerte para ti y tu familia.
Pedro.